Tras un nuevo fracaso en las negociaciones, el paro de transporte continúa su curso, dejando a Neuquén y Río Negro en un estado de incertidumbre.
El jueves se mantendrá el paro de 48 horas declarado por la UTA, privando a los usuarios de colectivos en las provincias afectadas. En Neuquén y Río Negro, las opiniones de las seccionales locales difieren, complicando aún más la situación.
El gremio emitió un comunicado la semana pasada justificando la medida de fuerza debido a la falta de acuerdo salarial con las empresas de transporte. Además, advirtieron que si no se atienden sus demandas, las acciones se intensificarán hasta obtener una resolución satisfactoria.
A pesar de las expectativas, las negociaciones formales no lograron avances significativos en una nueva audiencia virtual, llevando al fracaso de la reunión paritaria. La UTA confirmó la continuidad de las medidas de fuerza, señalando la falta de ofrecimientos por parte de la federación que representa a las empresas de transporte del interior del país.
Aunque se han alcanzado acuerdos locales en algunas regiones, como el Área Metropolitana, Río Negro se destaca por su negativa a otorgar aumentos salariales, lo que motiva la persistencia del paro en la provincia.
En cuanto al impacto en la región, se espera que los servicios urbanos de Bariloche y Viedma se vean afectados. Sin embargo, la UTA de Río Negro anunció que el servicio se normalizará el viernes, aunque se evaluará si se profundizan las medidas de fuerza la próxima semana.
En Neuquén, la situación es diferente, ya que la conducción local del gremio del transporte indicó que no se sumarán al paro, argumentando la resolución de los problemas salariales en toda la provincia.