El gobernador Alberto Weretilneck, anunció que el gobierno provincial asumirá el control de la construcción de la nueva terminal de Bariloche, con fondos propios, para reiniciar las obras una vez que pase el invierno.
El gobernador Alberto Weretilneck declaró al diario “El Cordillerano” de Bariloche que la provincia se encargará de la continuación de la obra de la nueva terminal, la cual se encuentra paralizada por falta de fondos nacionales. “Vamos a empezarla cuando pase el invierno con fondos provinciales. Todos los precios se han descompuesto y las actualizaciones volaron por el aire, por lo que hoy estamos rearmando todas las licitaciones. Tenemos la firme decisión de terminar con la obra”, explicó Weretilneck.
La construcción de la nueva terminal, que abarcará 3.774 metros cuadrados, incluirá un diseño inspirado en la estepa rionegrina y ajustado a las necesidades de una ciudad turística. La empresa Mocciola, encargada de la obra, había anunciado que la inversión sería de $1.465.305.057 antes de las recientes fluctuaciones económicas. Ahora, con las nuevas licitaciones, los costos deberán recalcularse para adaptarse a la inflación y otros factores.
El proyecto de la terminal incluye diversas características para mejorar la fluidez del tráfico y la comodidad de los pasajeros. Se diseñaron accesos que faciliten la entrada y salida de ómnibus y vehículos sin cruces de manos, y se duplicará la cantidad de dársenas de 12 a 24 para evitar congestionamientos. Además, el nuevo edificio tendrá seis salas de espera separadas de las áreas de compra de boletos y de las zonas de arribo, creando un flujo más ordenado de pasajeros.
Dentro del nuevo espacio, habrá 30 boleterías, duplicando las disponibles en la terminal actual. Se mantendrán las oficinas de la Dirección de Tránsito municipal y se incluirá una sala de primeros auxilios para atender emergencias. El objetivo es que la nueva terminal no solo sea más grande, sino también más funcional y segura para todos los usuarios.