Investigación judicial por irregularidades en comedores y fraude en fondos estatales.
El líder del Polo Obrero, Eduardo Belliboni, fue citado a indagatoria junto con otros 22 dirigentes sociales, en el marco de una investigación sobre la presunta administración fraudulenta de fondos del Plan Potenciar Trabajo y posibles irregularidades en comedores sociales. También se investigan amenazas y extorsiones en este contexto.
El juez federal Sebastián Casanello llamó a Belliboni y a varios dirigentes sociales a declarar debido a sospechas de fraude con los fondos del Plan Potenciar Trabajo. La investigación sugiere que se utilizó facturación falsa y se simularon gastos para desviar fondos estatales hacia fines no autorizados. Según Casanello, “lo público se confundió con lo privado al financiar actividad partidaria”.
Belliboni deberá comparecer el 25 de junio para dar explicaciones sobre las presuntas irregularidades en la gestión de los comedores sociales, una denuncia que ha sido impulsada por el gobierno de Javier Milei. El Ejecutivo también ha solicitado una auditoría sobre los recursos destinados a estos centros de asistencia.
La hipótesis del juez es que el Polo Obrero utilizó facturas apócrifas y simuló gastos para ocultar el uso real de una parte significativa de los fondos. Casanello afirmó que diversas personas asociadas con la “Asociación Polo Obrero” y la “Cooperativa El Resplandor Ltda.” habrían manejado indebidamente recursos estatales confiados a través de convenios con el ex Ministerio de Desarrollo Social.
El juez destacó que las pruebas señalan el uso de facturas falsas y la simulación de gastos mediante las firmas “Ediciones e Impresiones Rumbos SRL” y “Coxtex SA”, vinculadas al Polo Obrero. La investigación indica que se canalizaron fondos a través de estas entidades para obtener beneficios personales.
Además, Casanello ordenó al Ministerio de Capital Humano que presente un plan para distribuir los alimentos almacenados en sus depósitos. Se requiere un informe detallado del stock actual y un plan de distribución inmediata, considerando la cantidad, tipo, fecha de vencimiento y grupo destinatario de los alimentos, en respuesta a demoras significativas en la entrega a comedores sociales. Se estima que aproximadamente 5 mil toneladas de alimentos han estado almacenadas desde la gestión
