La presentación de las imágenes que muestran las heridas de la víctima provocó la reacción de Pablo Parra, el único acusado.
El juicio por el femicidio de Agustina Fernández, joven estudiante de Medicina, avanzó a su segunda jornada. Durante la sesión, un perito presentó imágenes impactantes del estado de la víctima, lo que llevó al acusado, Pablo Parra, a romper en llanto. Parra, de 36 años y trabajador petrolero, es el único imputado por el brutal asesinato ocurrido en el departamento donde vivía, en Cipolletti.
El juez del caso, Guillermo Baquero Lazcano, advirtió a todos los presentes sobre la naturaleza gráfica de las imágenes que se presentarían en la audiencia, solicitando que los padres de la víctima abandonaran la sala para evitarles un mayor impacto emocional. El perito, Gabriel Tonon, comenzó a describir las heridas visibles en el cuerpo de Agustina, quien murió a causa de una golpiza brutal que le causó muerte cerebral el 2 de julio de 2022. Fue en este momento cuando Parra, al observar las fotos, se quebró y se inclinó sobre sus rodillas, un comportamiento inesperado dado su habitual estoicismo durante el juicio.
En la primera jornada del juicio, la madre de Agustina, Silvana Capello, declaró sobre las condiciones en las que encontró a su hija en el hospital después del ataque. “Solo le pude reconocer la nariz”, dijo Capello, describiendo el horror y la brutalidad de la agresión.
El perito Tonon explicó que las imágenes se usaron para analizar la escena del crimen y que él mismo operó un dron para obtener vistas aéreas del lugar. Estas evidencias permitieron a la parte acusadora desarrollar su teoría, la cual sostiene que Parra ingresó a través de una obra vecina y luego trepó por el patio trasero para llegar a su departamento. Esto se refuerza con pruebas como un pedazo de tela con ADN de Parra encontrado en un alambre y una huella sobre un parrillero.
En la primera jornada del juicio, el acusado mantuvo una actitud distante y contenida, incluso mientras los padres y amigos de Agustina testificaban sobre su relación con el vecino. Sin embargo, la segunda jornada y la presentación de las imágenes de la brutal golpiza llevaron a Parra a mostrar una respuesta emocional significativa, dejando a todos los presentes en shock.